Los espacios más característicos de los Jardins de Cap Roig son el castillo, edificio principal de la finca declarado Bien Cultural de Interés Nacional, y las torres fortificadas de planta cuadrada, que conforman un conjunto de línea medieval, edificadas por Nicolai Woevodski y Dorothy Webster en 1931 y que se acabaron de construir en 1975. Otra construcción que realizaron los fundadores fue el Poblat, un conjunto de casas de color blanco y capilla, caballerizas, garajes y palomar. Todo ello, ubicado alrededor de una placeta que recuerda a un pueblo de estilo mediterráneo cuya finalidad era albergar a los trabajadores que construyeron y cuidaron el jardín. El matrimonio Woevodski abordó también la construcción del embarcadero en la cala d’en Massoni, que con el paso del tiempo llegó a recibir el nombre de la Banyera de la Russa.

Desde que en el año 2011 la Fundación ”la Caixa” se hizo cargo de los Jardins de Cap Roig el objetivo de la entidad ha sido mejorar, transformar y hacer crecer este paraje emblemático respetando el medioambiente y el espacio natural en el que se encuentra. Siguiendo esta línea, en 2016 se puso en funcionamiento una zona de pícnic protagonizada por un túnel orgánico de mimbre y varios juegos lúdicos. Es un espacio inclusivo y apto para todo el mundo para disfrutar de la naturaleza, especialmente para los grupos escolares y las familias.

El Jardí de la Dorothy se creó en 2020, rodeado de vegetación, con pequeñas fuentes de agua y mobiliario para el descanso. Está dedicado a la lectura y la relajación. Además, en este espacio se llevan a cabo las actividades literarias organizadas en colaboración con la Fundació Josep Pla.

En 2022 se ha abierto al público el auditorio enterrado del castillo, con una capacidad de 182 personas para actos de debate y conferencias, un proyecto con el que se pretende dinamizar durante todo el año el espacio natural del jardín botánico.